El CSIC ha desarrollado un ferrofluído acuoso basado en nanopartículas magnéticas dispersadas en agua y estabilizadas con un biopolímero. Estos ferrofluidos se obtienen en un solo paso mediante un método reproducible que da lugar a dispersiones estables coloidalmente por períodos medidos de 6 meses a pH fisiológico. Además, estos ferrofluídos presentan un alto poder específico de absorción (SPA) lo que permite incrementos notables de temperatura en poco tiempo. Por sus propiedades y su composición estos ferrofluídos patentados son ideales para aplicaciones en hipertermia.
Se buscan empresas del sector farmacéutico, médico o químico interesadas en la licencia de la patente para el desarrollo y comercialización de aplicaciones.
Para aplicación vía intravenosa
Los métodos actuales para producir ferrofluídos acuosos para aplicaciones en biomedicina implican más de una etapa y conducen a dispersiones con una estabilidad coloidal mejorable. Cuando se usan biopolímeros obtenidos a partir de fuentes naturales como estabilizantes, no existen métodos estandarizados para determinar su peso molecular, lo que no permite el control ni la reproducibilidad de la reacción de obtención debido a la gran variabilidad existente en los polímeros de partida.
Los ferrofluídos desarrollados por el CSIC consisten en nanopartículas de hierro estabilizadas con alginato de sodio y dispersadas en agua. Se sintetizan y estabilizan en agua en un solo paso y en condiciones suaves. Su alto poder específico de absorción (SPA) permite un calentamiento magnético de 17ºC en sólo 90 segundos cuando se aplica un campo magnético de 300G a una frecuencia de 440kHz. Además, el tamaño de las nanopartículas está en torno a 8 nm lo que, unido a su buena estabilidad a pH fisiológico permitiría su utilización vía intravenosa.
Principales aplicaciones y ventajas
- Síntesis en un solo paso y control del peso molecular del biopolímero que está entre 155000 y 175000 Da.
- Altos SPA lo que conduce a altos incrementos de temperatura en tiempos muy cortos.
- Tamaño de partícula en torno a 8 nm lo que unido a su estabilidad coloidal y al uso de un biopolímero como agente estabilizante, inherentemente biocompatible y biodegradable, permite la aplicación del ferrofluido vía intravenosa.
- Por sus características, estos ferrofluídos están indicados para el tratamiento mediante hipertermia.